El antiguo acuerdo de Tránsito de gas ruso a Europa a través de Ucrania cesó el miércoles, como confirmaron tanto Moscú como Kiev, lo que marca un avance significativo tras el conflicto entre las naciones vecinas.
Desde 1991, tras la disolución de la Unión Soviética, el gas ruso fluyó hacia Europa a través de gasoductos ucranianos, generando ingresos para ambas naciones: Rusia por las ventas de gas y Ucrania por las tarifas de tránsito.
El acuerdo de tránsito concluyó el miércoles y Ucrania decidió no renovarlo tras la acción militar rusa de 2022, informó AFP.
Ucrania celebró este cese como un hecho trascendental, sugiriendo que afectaría los recursos financieros y las capacidades militares de Rusia.
Rusia, sin embargo, sostiene que la decisión de Ucrania es contraproducente y problemática para sus socios de Europa del Este que dependen de los suministros rusos.
Eslovaquia ha criticado este hecho, mientras que otros miembros de la UE, incluida Polonia, han expresado su apoyo.
En 2023, el gas ruso constituía menos del 10 por ciento del Importaciones de gas de la UEsignificativamente reducido desde más del 40 por ciento antes de la guerra.
Sin embargo, varios miembros del este de la UE siguen dependiendo en gran medida de las importaciones rusas.
El Ministro de Energía de Ucrania, German Galushchenko, anunció: «Hemos detenido el tránsito de gas ruso», describiéndolo como «un acontecimiento histórico».
«Rusia está perdiendo sus mercados y sufrirá pérdidas financieras», afirmó.
Gazprom confirmó el cese del tránsito de gas a través de Ucrania a partir de las «08:00 horas (05:00 GMT)», citando la pérdida de «derechos técnicos y legales» para el transporte transfronterizo.
Los precios europeos del gas superaron los 50 euros por megavatio hora el martes, alcanzando un máximo del año mientras los compradores de Europa del Este se preparaban para la interrupción del suministro.
El primer ministro eslovaco, Robert Fico, criticó el hecho, advirtiendo de las consecuencias para toda la UE y sugiriendo un impacto mínimo en Rusia.
Fico, que asumió el poder en 2023, ha llevado a Eslovaquia hacia una alineación más estrecha con Moscú.
El Ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radoslaw Sikorski, acogió con satisfacción el desarrollo de X, comparándolo con «una nueva victoria después de la ampliación de la OTAN a Finlandia y Suecia».
Hungría sigue sin verse afectada en gran medida y recibe gas ruso principalmente a través del gasoducto del Mar Negro a través de Turquía y los Balcanes.
Bruselas ha minimizado las preocupaciones sobre el impacto en la UE, destacando su preparación de un año para este escenario.
Ucrania ha criticado a las naciones que continúan comprando energía rusa durante el conflicto, argumentando que financia las acciones militares de Rusia.
Los ingresos por energía siguen siendo vitales para la economía rusa, ya que Moscú está redirigiendo sus exportaciones a los mercados asiáticos en medio de las sanciones occidentales.
Por otra parte, Gazprom anunció la suspensión del suministro de gas a Moldavia, lo que provocó un estado de emergencia en relación con el suministro de energía en la nación, que recibe gas a través de la región de Transnistria, respaldada por Rusia.
La electricidad de Moldavia proviene principalmente de una central eléctrica con sede en Transnistria que utiliza gas ruso.