En una amplia ofensiva contra la inmigración, Donald Trump firmó el lunes una orden ejecutiva destinada a poner fin a la ciudadanía por nacimiento para algunos niños nacidos en Estados Unidos.
Esta acción desafía un principio estadounidense profundamente arraigado: el derecho a la ciudadanía por nacimiento, independientemente del origen. Los críticos advierten que tal política podría crear una subclase permanente, que afectaría desproporcionadamente a las comunidades de color.
Se espera que la orden ejecutiva enfrente desafíos legales, ya que los grupos de derechos civiles argumentan que contradice la Constitución y más de un siglo de precedentes legales.
Aquí hay un desglose de la ciudadanía por nacimiento y las implicaciones de esta controvertida orden:
¿Qué es la ciudadanía por nacimiento?
La ciudadanía por nacimiento es el principio legal del jus soli, o “derecho al suelo”, que otorga la ciudadanía a casi todas las personas nacidas en suelo estadounidense.
La base legal de la ciudadanía por nacimiento
El principio de jus soli tiene sus raíces en el derecho consuetudinario inglés, que reconocía como sujeto natural a toda persona nacida dentro del territorio.
En Estados Unidos, este concepto está consagrado en la 14ª Enmienda, ratificada en 1868 para abordar las injusticias tras la infame decisión Dred Scott de 1857 de la Corte Suprema, que negó la ciudadanía a los descendientes negros de personas esclavizadas.
La Cláusula de Ciudadanía de la 14ª Enmienda establece:
«Todas las personas nacidas o naturalizadas en los Estados Unidos, y sujetas a su jurisdicción, son ciudadanos de los Estados Unidos y del Estado en el que residen».
Esta cláusula, junto con los estatutos relacionados, forma la base de la ciudadanía moderna por derecho de nacimiento.
Precedentes legales para hijos de inmigrantes
En 1898, la Corte Suprema dictaminó en Estados Unidos contra Wong Kim Ark que los niños nacidos en suelo estadounidense de padres no ciudadanos son ciudadanos. A Wong Kim Ark, nacido en San Francisco de padres inmigrantes chinos, se le negó el reingreso a Estados Unidos después de un viaje al extranjero. El Tribunal confirmó su ciudadanía, estableciendo un precedente histórico que sigue siendo fundamental en la actualidad.
Excepciones a la ciudadanía por nacimiento
Si bien la ciudadanía por nacimiento se aplica de manera amplia, existen raras excepciones:
- Los indígenas estuvieron excluidos hasta que una ley de 1924 les concedió la ciudadanía.
- En 2021, la Corte Suprema dictaminó que las personas nacidas en Samoa Americana, un territorio estadounidense, no tienen automáticamente derecho a la ciudadanía por nacimiento a menos que el Congreso legisle lo contrario.
- También quedan excluidos los hijos de diplomáticos extranjeros y de fuerzas de ocupación hostiles.
Ciudadanía por nacimiento en todo el mundo
Contrariamente a las afirmaciones de Trump de que Estados Unidos es el único país que otorga la ciudadanía por nacimiento, muchos países del hemisferio occidental, incluidos Canadá y México, siguen principios similares. Sin embargo, la ciudadanía por nacimiento es menos común en otras regiones.
¿Qué hace la orden ejecutiva de Trump?
La orden ejecutiva tiene como objetivo negar la ciudadanía a los niños nacidos en Estados Unidos si ninguno de los padres es residente permanente legal o ciudadano. También prohíbe a las agencias federales emitir documentación que demuestre la ciudadanía de estos niños.
La política está dirigida a los hijos tanto de inmigrantes indocumentados como de aquellos que se encuentran legalmente en Estados Unidos con visas temporales.
¿Podría Trump acabar con la ciudadanía por nacimiento?
Los expertos dicen que es muy poco probable que se pueda poner fin a la ciudadanía por nacimiento mediante una orden ejecutiva.
La Decimocuarta Enmienda garantiza este derecho, y los juristas coinciden en que ni la acción ejecutiva ni la legislación pueden anular la Constitución. La decisión de la Corte Suprema en el caso Wong Kim Ark es una piedra angular de este principio.
Sin embargo, la orden de Trump podría provocar una batalla legal que ponga a prueba los límites de la interpretación constitucional. Obligar a la Corte Suprema a reconsiderar la 14ª Enmienda parece ser una estrategia a largo plazo. Sin embargo, es improbable revocar un precedente tan fundamental.
Enmendar la Constitución es otra vía, pero requeriría un apoyo político abrumador, un escenario muy improbable dadas las divisiones del tema.
Otras tácticas para limitar la ciudadanía por nacimiento
Incluso si la orden ejecutiva fracasa, la administración podría aplicar otras estrategias, como restringir las visas de corto plazo para viajeras embarazadas para evitar que den a luz en Estados Unidos.
El intento de Trump de remodelar la ciudadanía por nacimiento plantea serias cuestiones constitucionales y ha encendido un feroz debate legal y político sobre el futuro de la política de inmigración en Estados Unidos.