Una reunión familiar festiva en Brasil se convirtió en tragedia después de que tres mujeres murieran por presunto envenenamiento relacionado con un pastel de Navidad casero, lo que desató una investigación criminal.
Tatiana Denize Silva dos Anjos, de 43 años, y Maida Berenice Flores da Silva, de 58, fallecieron de un paro cardíaco el lunes después de consumir Bolo de Natal, un tradicional pastel navideño brasileño, durante una celebración navideña en la ciudad costera de Torres.
Neuza Denize Silva dos Anjos, de 65 años, murió en Nochebuena y la causa de su muerte fue identificada como “shock tras envenenamiento”, según informes del hospital local.
La Policía Civil confirmó la presencia de arsénico en los análisis de sangre realizados a dos supervivientes y a uno de los fallecidos, lo que generó dudas sobre la preparación de la tarta.
Las inquietantes muertes también han atraído un nuevo escrutinio sobre la muerte en septiembre del marido de Zeli, quien supuestamente murió por intoxicación alimentaria. La policía está solicitando permiso para exhumar su cuerpo para un examen más detenido.
Otros tres miembros de la familia, entre ellos un niño de 10 años, permanecen hospitalizados, entre ellos Zeli Terezinha Silva dos Anjos, de 61 años, quien preparó el pastel junto con su hermana y fue anfitriona de la reunión.
Las autoridades descubrieron en la casa de Zeli productos alimenticios caducados y un frasco de medicamento sospechoso que contenía un líquido blanco, los cuales están siendo sometidos a análisis de laboratorio.
«Había productos vencidos en la residencia», dijo la policía, y agregó: «Se encontró un frasco, un medicamento, que debería haber tenido cápsulas dentro y no había cápsulas; había un líquido blanco y este líquido blanco también será examinado». «
La policía también informó que Zeli consumió 2 rebanadas del pastel y fue la primera en ser trasladada de urgencia al hospital.
A pesar de la creciente evidencia, la policía dijo que no había indicios de disputas de herencia o tensiones familiares antes de la tragedia, según el New York Post.
Un amigo de una de las víctimas describió la tradición familiar anual de hornear el pastel como un evento preciado. “Era un pastel tradicional familiar, un pastel de rey, que siempre hacían”, compartió el amigo.
La investigación continúa mientras las autoridades trabajan para determinar si el envenenamiento fue accidental o deliberado, arrojando una sombra sobre la preciada tradición navideña de una familia.