La policía se enfrenta a manifestantes que bloquean una carretera durante una protesta que exige un acuerdo de alto el fuego y la liberación inmediata de los rehenes retenidos en la Franja de Gaza por Hamás, en Tel Aviv, Israel, el sábado.
Ariel Schalit/AP
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Después de más de 15 meses de combates en la guerra más devastadora de su historia, Israel y Hamás están muy cerca de acordar un alto el fuego, según funcionarios involucrados en las conversaciones.
Majed Al Ansari, asesor del primer ministro qatarí y portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, dijo a los periodistas en Doha, donde se llevan a cabo las conversaciones, que un acuerdo «no estaba muy lejos». Añadió que los principales obstáculos han sido superados y las conversaciones ahora son «sobre los últimos detalles».
Se negó a dar detalles del inminente acuerdo. Pero un funcionario israelí, que habló bajo condición de anonimato debido a lo delicado de las conversaciones, describió algunas de las disposiciones clave.
El acuerdo en discusión prevé una pausa de seis semanas en los combates, durante las cuales 33 rehenes israelíes retenidos por Hamás y otros militantes en Gaza serán liberados, a cambio de un número mucho mayor de detenidos palestinos, según una fórmula que da más peso a los rehenes que son liberados con vida. Se espera que el número total de palestinos liberados de la custodia israelí sea de alrededor de 1.000, según un funcionario palestino, que no estaba autorizado a hablar con los medios.
Israel describe a los rehenes que serán liberados como casos humanitarios, y el funcionario israelí dijo que se trata de mujeres, personas mayores de 50 años, niños y heridos y enfermos.
El inminente acuerdo se produce después de semanas de una serie de intensas rondas de negociaciones en Doha entre Israel y Hamás. Representantes de ambas partes estaban en salas diferentes, mientras los mediadores de Estados Unidos, Egipto y Qatar transmitían mensajes.
También estuvieron allí enviados tanto de la administración del presidente Biden como del equipo del presidente electo Trump, presionando a las partes para cerrar un acuerdo. La anticipación creció el fin de semana pasado después de que Steve Witkoff, el enviado de Trump a Medio Oriente, viajara a Qatar y una delegación israelí que incluía al jefe de inteligencia del Mossad, David Barnea, y a Ronen Bar, director de la agencia de seguridad interna Shin Bet, llegaron y se unieron a las conversaciones.
El objetivo de los negociadores era firmar un acuerdo o un camino hacia un acuerdo de alto el fuego antes del día de la toma de posesión, el 20 de enero.
Incluso después de que se firme el acuerdo, tendría que ser aprobado por todo el gabinete y el gobierno israelí, y es probable que sea impugnado ante la Corte Suprema de Israel. Por lo tanto, pueden pasar días antes de que se implementen los términos.
Pero se espera que el primer intercambio de rehenes israelíes y detenidos palestinos tenga lugar inmediatamente después de que comience la implementación, tal vez incluso el mismo día. Las dos partes también están hablando de acuerdos para permitir que los palestinos desplazados en el sur de Gaza regresen a sus hogares en el norte.
Una nueva ronda de negociaciones comenzará 16 días después de la primera fase del acuerdo, sobre nuevas retiradas de tropas israelíes de Gaza, aunque el funcionario israelí dijo que no se produciría una retirada total hasta que todos los rehenes sean liberados por completo.
Grandes sectores del público tanto en Israel como en Gaza están agotados por el conflicto y acogerán con agrado un acuerdo que prometa un fin definitivo. Sin embargo, algunos miembros conservadores del gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu ya han expresado su oposición al acuerdo con el argumento de que Hamás debería ser completamente erradicado para evitar que se repita el ataque del 7 de octubre de 2023 contra Israel, en el que combatientes de Hamás y otros militantes Mató a unas 1.200 personas y tomó más de 250 rehenes.
Alrededor de 100 rehenes fueron liberados en un acuerdo similar entre Israel y Hamás a finales de 2023, mientras que otros fueron rescatados o encontrados muertos. Alrededor de 240 palestinos fueron liberados de cárceles israelíes como parte de ese acuerdo.
Muchas familias de los rehenes restantes cuya liberación no está prevista en la primera fase temen que disminuya la presión para liberar a sus familiares. Han estado presionando para lograr un acuerdo integral que ponga fin a la guerra y garantice la liberación de todos los rehenes.
La energía renovada en las conversaciones coincide con un aumento de los combates sobre el terreno. Desde el sábado, al menos 79 palestinos han muerto, según las autoridades sanitarias de Gaza, mientras que el ejército israelí informó de la muerte de nueve soldados.
Esas bajas elevan el número total de muertos durante la guerra a más de 46.000 palestinos, según las autoridades sanitarias de Gaza, que no han especificado cuántos de ellos eran combatientes. Sin embargo, señalaron que la mayoría de las muertes verificadas eran mujeres y niños. El ejército israelí dice que 405 soldados han muerto en combates desde que invadió Gaza tras el ataque del 7 de octubre.
Israel y Hamás han librado varias guerras desde que la organización militante palestina arrebató el control de la Franja de Gaza a la Autoridad Palestina en 2007. Sin embargo, ninguno de los conflictos anteriores ha sido tan largo ni tan mortífero.