Un juez de Manhattan denegó la solicitud del presidente electo Donald Trump de posponer su sentencia en un caso de silencio, prevista para poco más de una semana antes de su toma de posesión.
El juez Juan Merchán confirmó su decisión anterior a pesar de las apelaciones del equipo legal de Trump, rechazando el lunes el intento de retrasar el caso de alto perfil.
Trump, condenado por falsificar registros comerciales en 2023, enfrenta sentencia el 10 de enero de 2025, aunque es poco probable que vaya a prisión.
El equipo legal de Trump argumentó que su reciente victoria electoral debería justificar un retraso, pero el tribunal sostuvo que el procedimiento debe continuar según lo previsto. La sentencia está fijada para el viernes 10 de enero, apenas diez días antes de la toma de posesión de Trump como el 47º presidente de Estados Unidos.
El juez Merchan señaló en su fallo que los argumentos de Trump repetían en gran medida mociones anteriores que habían sido rechazadas anteriormente. “Por la presente se rechaza la moción del demandado para suspender este procedimiento”, escribió Merchan. Los abogados de Trump habían pedido al juez que retrasara la sentencia mientras apelaban su condena ante un jurado de Manhattan.
Merchan indicó que está considerando una liberación incondicional, evitando a Trump tanto el encarcelamiento como la libertad condicional. Sin embargo, esto aún lo convertiría en el primer presidente estadounidense en ingresar a la Casa Blanca como un delincuente convicto.
Trump, de 78 años, fue certificado como ganador de las elecciones de 2024 después de una campaña polémica. Su segundo mandato comienza el 20 de enero de 2025, lo que marca un notable regreso político después de su derrota en 2020 y los disturbios en el Capitolio que siguieron.