El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, parecía imperturbable durante una audiencia de sentencia en Nueva York el viernes mientras jugaba casualmente una ronda de golf en Club de golf internacional Trump en West Palm Beach, Florida, informa el New York Post.
En fotografías exclusivas reveladas por el Post, Trump, con su gorra distintiva que decía “Trump tenía razón en todo”, fue visto desviándose por el campo en un carrito de golf, pocas horas después de que el juez Juan Merchán dictara su sentencia en Corte Suprema de Manhattan.
La audiencia se produjo tras la condena de Trump por 34 cargos de delitos graves, que surgieron de un pago de 130.000 dólares para mantener su silencio realizado a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels durante la campaña presidencial de 2016.
En una declaración en video de seis minutos ante el tribunal desde Mar-a-Lago, Trump dijo: “Este es un caso que nunca debería haberse presentado. El hecho es que soy totalmente inocente, no hice nada malo”. Merchan condenó al expresidente a una “liberación incondicional” y le deseó buena suerte mientras se prepara para iniciar su segundo mandato.
Después de la audiencia, Trump recurrió a Truth Social, donde continuó desestimando los cargos como un ataque por motivos políticos. “Los demócratas radicales han perdido otra patética y antiestadounidense cacería de brujas”, escribió en un extenso artículo.
Los cargos contra Trump se derivan de su presunta participación en una conspiración para socavar las elecciones presidenciales de 2016. Los fiscales lo acusaron de orquestar un pago ilegal a Daniels, realizado a través de su entonces abogado. Michael Coheny categorizarlo falsamente como gastos legales. Si bien el delito conlleva una sentencia máxima de cuatro años de prisión, el hecho de que Trump haya cometido un delito por primera vez significaba que era poco probable que lo encarcelaran.
Trump, quien se declaró inocente, había criticado previamente el caso como un ataque político por parte del fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg. La sentencia marca la conclusión de una larga batalla legal, durante la cual los intentos de Trump de que se desestimaran los cargos (citando decisiones de la Corte Suprema y acusaciones de parcialidad del fiscal) no tuvieron éxito.
Trump fue visto en el mismo campo de golf donde un aspirante a asesino, armado con un AK-47, había acampado una vez cerca del hoyo 6, con el objetivo de apuntar a Trump durante una ronda de golf.