Los astrónomos han descubierto lo que llaman la estructura más grande conocida del universo. Llamado «Quipu» después de un sistema de medición inca, la superestructura abarca un asombroso 1.300 millones de años luz de luz en el cual es más de 13,000 veces la duración de la Vía Láctea, según un informe en Ciencia en vivo.
El contendiente actual para la estructura más grande del universo es la Gran Muralla Hércules-corona borealis, que se encuentra a 10 mil millones de años luz de la Tierra y abarca 10 mil millones de años luz, pero su existencia permanece en disputa.
Mientras miraban los datos, los investigadores descubrieron Quipu, así como cuatro estructuras más gigantes. Juntos, estos cinco superclusters contienen el 45 por ciento de los grupos de galaxias, el 30 por ciento de las galaxias y el 25 por ciento de la materia en el universo observable, según el estudio publicado en el sitio web de preimpresión Arxiv que aún no se ha revisado por pares.
«Quipu es en realidad una estructura prominente fácilmente notable a los ojos en un mapa del cielo de los grupos en el rango de desplazamiento al rojo objetivo, sin la ayuda de un método de detección», escribió el equipo en el documento.
Los superclusters son grandes colecciones de grupos de galaxias, grupos y galaxias individuales que generalmente no están unidas entre sí. Por ejemplo, nuestra galaxia de la Vía Láctea se encuentra en los bordes exteriores del Supercluster Laniakea.
Según el estudio, Quipu es responsable de una «gran parte de la atracción gravitacional que causa el movimiento peculiar del grupo local con respecto al marco de fondo de microondas cósmico (CMB)». Sin embargo, se necesita más información para identificar los efectos de dicha estructura en su vecindario.
«Para una determinación precisa de los parámetros cosmológicos, necesitamos comprender los efectos de la estructura local a gran escala del universo en las mediciones», escribieron los autores …
‘Configuraciones transitorias’
Los científicos agregaron que si bien la superestructura era de tamaño masivo actualmente, pronto colapsaría y formaría unidades independientes.
«En la futura evolución cósmica, estas superestructuras están destinadas a dividirse en varias unidades colapsantes», destacó el estudio.
«Por lo tanto, son configuraciones transitorias. Pero en la actualidad, son entidades físicas especiales con propiedades características y entornos cósmicos especiales que merecen atención especial».
Según los investigadores, estudiar un objeto tan masivo como Quipu podría ayudar a ampliar nuestra comprensión de cómo evolucionan las galaxias y mejoran nuestros modelos cosmológicos.