Sé lo que es cuando el pensamiento de mirando tus finanzas personales hace que se te revuelva el estómago. El primer paso para controlar sus gastos es analizar detenidamente a dónde va realmente su dinero. Ahora, he previamente lamentado A cuántas fuentes les gusta exagerar el impacto de las compras pequeñas, como el café helado de la mañana, en sus finanzas a largo plazo. Al mismo tiempo, no debería gastar más de lo que gana, lo que dificulta saldar deudas y ahorrar dinero para el futuro.

Si no sabe por dónde empezar a hacer un presupuesto, o el actual no parece funcionar para usted, una auditoría de gastos es una excelente manera de obtener los números correctos y hacer un plan que funcione para usted. Porque si ignoras deliberadamente ciertos malos hábitos de gasto o has sido víctima de una tendencia más amplia de estilo de vida arrastradoes fácil perder la pista de dónde alguno de su efectivo se va. A continuación le mostramos cómo realizar una auditoría de gastos y posicionarse para tomar mejores decisiones financieras en el futuro.

¿Qué es una auditoría de gastos?

Una auditoría es una revisión, no un presupuesto. Muchas personas optan por mirar hacia adelante y crear un presupuesto sin ser honestos acerca de sus hábitos de gasto actuales. Pero el objetivo de “recortar el gasto” es abstracto y difícil de lograr. Es mejor averiguar primero cuánto está gastando realmente y partir de ahí.

Piense en su auditoría de gastos como el primer paso, a veces doloroso, pero definitivamente necesario, para crear un presupuesto que realmente funcione para usted. Revise todas sus transacciones durante un período de tiempo determinado; para nuestros propósitos, digamos tres meses de gastos. Luego, considere lo que dicen los resultados sobre sus hábitos de gasto y lo que puede cambiar.

Cómo realizar su auditoría de gastos

A continuación le mostramos cómo realizar una auditoría de gastos eficaz que le ayudará a mejorar sus hábitos de gasto en el futuro.

Reúne todos tus números

Comience su auditoría recopilando aproximadamente tres meses de estados financieros de todas sus cuentas, incluidos:

  • Extractos de tarjetas de crédito

  • Transacciones de cuentas bancarias

  • Servicios de pagos digitales (PayPal, Venmo, etc.)

  • Gastos en efectivo (seguidos a través de recibos)

Considero que tres meses proporcionan datos suficientes para identificar patrones sin dejar de ser manejables para analizar. Tener toda esta información en un solo lugar ayuda a crear una imagen completa de sus hábitos de gasto.

Clasifica tus transacciones

Cree categorías significativas que reflejen su estilo de vida. Las categorías comunes incluyen:

  • Vivienda (alquiler/hipoteca, servicios públicos, mantenimiento)

  • Transporte (pagos de automóviles, combustible, transporte público)

  • Comida (comestibles, salir a cenar)

  • Entretenimiento (servicios de streaming, pasatiempos, eventos)

  • Atención médica (seguros, medicamentos, citas)

  • Cuidado personal (cortes de pelo, membresías en gimnasios, ropa)

  • Pagos de deudas (préstamos estudiantiles, tarjetas de crédito)

Revise cada transacción y asígnela a una categoría. Sea honesto consigo mismo: esa visita a la cafetería puede ser «comida» o «entretenimiento», según su perspectiva y sus hábitos.

Empieza a buscar patrones.

A continuación, busque patrones que iluminen su comportamiento de gasto. Una forma de hacerlo es marcar cada elemento en sus extractos bancarios. Coloque una estrella junto a las compras necesarias, una marca junto a las compras discrecionales con las que se siente bien y una «X» junto a las que son más cuestionables.

Una vez que haya marcado todos los gastos de los que se arrepiente o desea cambiar en el futuro, agrúpelos y hágase algunas preguntas para identificar sus áreas problemáticas. Piensa: ¿Tu hábito del café está fuera de control? ¿Estás gastando demasiado en la membresía de un gimnasio que rara vez usas? ¿Se te han ido de las manos tus suscripciones mensuales? ¿Los pagos de sus deudas son más altos de lo que puede pagar en este momento? Te sorprenderá saber cuántos gastos podrás eliminar, ya sea porque no fueron intencionales o porque fueron motivados por el estrés.

Crea un presupuesto que se adapte a tu estilo de vida

Finalmente, al final de la auditoría, sume todas estas áreas problemáticas para obtener una aproximación aproximada de cuánto dinero podría destinar a ahorros si cambiara sus hábitos. Calcule porcentajes para cada categoría en relación con su gasto total. Compárelos con pautas financieras comunes, como la regla 50/30/20 (50% necesidades, 30% deseos, 20% ahorros).

Una auditoría de gastos es un ejercicio sencillo que le permite gastar un poco más conscientemente ahora, antes de que las cosas se salgan de control más adelante. Y ahora que ha realizado su auditoría, aquí hay algunas maneras puedes empezar a elaborar un presupuesto).



Source link