Los propietarios de PERROS en toda España ahora están obligados a contratar un seguro de responsabilidad civil obligatorio para todos los propietarios de perros, independientemente de su raza.
La norma, que entró en vigor el 29 de septiembre en virtud de la Ley de Bienestar Animal del país, marca un cambio significativo con respecto a antes.
Anteriormente, el seguro sólo era obligatorio para los propietarios de razas potencialmente peligrosas, como pitbulls y dóbermans.
Sin embargo, según el artículo 30 de la nueva ley, los propietarios deben mantener una cobertura de seguro válida durante toda la vida de su mascota.
Esto significa que incluso los propietarios de perros pequeños, como chihuahuas o yorkshire terriers, deben contratar el seguro de responsabilidad civil necesario.
Si bien las autoridades reguladoras aún no han determinado el monto mínimo de cobertura, debe ser suficiente para cubrir cualquier daño potencial causado por el animal a terceros.
Las implicaciones de costos para los dueños de mascotas varían significativamente.
El seguro básico de responsabilidad civil a terceros comienza entre 25 y 30 euros al año para la mayoría de las razas, aunque los dueños de perros potencialmente peligrosos pueden enfrentar primas más altas.
Una cobertura más amplia que incluya atención veterinaria podría alcanzar hasta 400 euros al año, mientras que la cobertura específica de accidentes ronda los 97 euros al año.
Es posible que muchos propietarios ya estén cubiertos por sus pólizas de seguro existentes.
Sin embargo, quienes no tengan cobertura deberán adquirir pólizas separadas para cumplir con las nuevas regulaciones.
La ley también introduce cursos de formación obligatorios para los dueños de perros, destinados a promover la tenencia responsable de mascotas y prevenir incidentes.
El incumplimiento de estos nuevos requisitos podría resultar costoso.
Las sanciones van desde advertencias formales hasta multas sustanciales de entre 500 y 10.000 euros, dependiendo de la gravedad de los incidentes que afecten al animal.
La legislación tiene como objetivo fomentar una mayor responsabilidad entre los dueños de perros y al mismo tiempo garantizar una mejor protección tanto para los animales como para el público.
Para muchos dueños de perros, esto significa revisar sus pólizas de seguro actuales y potencialmente enfrentar costos anuales adicionales para cumplir con los nuevos requisitos.